fairy

quizás mientras camine por el bosque me detenga en mi próximo paso, un pie casi delante del otro, todo en calma, algo extraño se apodera de mi, mi pelo largo y castaño se alborota indomable y se queda suspendido en el aire, todo está inmóvil, mis brazos extendidos se elevan lentamente hasta la altura de mis hombros, mis palmas hacia arriba para sostener estrellas del cielo o del mar, o del mal, que brillan exquisitas como brillan ahora mis ojos; me parece sentir alas en la espalda; las sonrisas más chispeantes fluyen de mis labios húmedos, mariposas en el estómago que se posan sobre mi nariz, llenas de sueños de colores, con alas grandes, me rodean indecisas en su rumbo, las veo partir, feliz de que por fin alguien más cargue con mis sueños...

de que sirven las estrellas sin su mar de cielos...?
para qué ser un hada sin el don de la protección...?
a mi nadie me protege...

la sonrisa se me borra de a poco, se consume, se duerme; las estrellas son ahora puñados de arena en mis manos, que dejo caer lentamente, como caen mis brazos, mi pelo se moja con la lluvia, su rebeldía se convierte en poca gracia,
la lluvia también transparenta mi ropa y deja ver el frío que me cubre; de rodillas sobre el musgo, secos los labios, cerrados y húmedos los ojos al ver mariposas muertas por doquier, de alas grises, pequeñas y vacías...

aire azul de la noche, mezcla de sombras, silencio...